Durante la niñez perdemos nuestros dientes de leche, como parte de otra etapa bastante más de nuestro desarrollo y avance. Sin embargo, la falta de dientes en un adulto es una situación irreversible que también puede perjudicar a nuestra vida día tras día, puede modificar nuestra seguridad y autovaloración.
Aunque tenemos la posibilidad de perder varios de los dientes definitivos en cualquier ocasión de nuestra vida, este suceso frecuenta darse primordialmente en pacientes de cierta edad.
Principales causas de la falta de dientes
Más allá de que algunos traumatismos tienen la posibilidad de provocar la falta de piezas dentales, este inconveniente es el primordial resultado de dos enfermedades dentales que no fueron tratadas a tiempo o correctamente: En primer lugar, están las anomalías de la salud periodontales (gingivitis y periodontitis).
Cuando estas son muy destacadas, destruyen el tejido que sujeta los dientes, lo que hace que estos comiencen a desplazarse hasta caerse.
Otra de las causas tiene la posibilidad de ser una caries tan avanzada que no logre eliminarse ni con una endodoncia. Para lograr terminar con la infección y evitar que esta se alargue, es imprescindible extraer el diente afectado.
Principales inconvenientes de la caída de dientes
En la mayoría de los casos, un individuo que ha perdido algunos de sus dientes consume primordialmente comestibles blandos, ya que no puede masticar de manera correcta. Esto deriva en un desgaste en la funcionalidad masticatoria, lo que puede ocasionar inconvenientes alimenticios y digestivos.
Con el tiempo, además tienen la posibilidad de manifestarse problemas realmente graves, dolor de cabeza o de cervicales y inconvenientes auditivos.
Tratamientos para la perdida de dientes
Antes, la carencia de alguna de las piezas dentales se solía solucionar con la habitual dentadura postiza o prótesis dental removible. No obstante la ciencia en este tema ha mejorado de enorme manera. En Clínica Dental Madrid Río ponemos a tu disposición los últimos adelantos en implantología, ya que pensamos que es el más destacable régimen para la falta de dientes. ¡Apenas verás la diferencia! En media hora ponemos el tornillo y en 3 o 4 meses la parte. ¿Cuáles son las primordiales virtudes de la implantología sin cirugía? Empleamos una técnica muy poco invasiva. La rehabilitación es muy ligera y el postoperatorio es indoloro y sin hinchazones. No es requisito usar puntos de sutura. Podrás volver a llevar a cabo vida habitual en el instante.
